Despejando la mente.

Otro dia estaba casi terminando en el horizonte se veia ya, como se aproximaba el atarcecer su momento del dia preferido.
Ella se encontraba buscando relajarse despues de un largo dia, camino entre los pasillos hasta llegar al jardin de las rosas,
en donde busco un buen lugar para sentarse y comenzar a despejar su mente, la cual no la dejaba en paz.
La verdad es que sentia culpa y eso la estaba matando, se sentia culpable de haber mordido a su mejor amigo, aun no recordaba bien como fue todo, solo que lo mordio.
Solto un suspiro de resignacion por que la verdadera culpa la sentia al pensar , que ahora no estaba sola, tenia una pequeña manada, una nueva familia y eso la hacia inmensamente feliz, alli se erradicaba su pesar.
Como podia volver a verle con tranquilidad cuando se sentia culpable de sentirse feliz , por morderle le habia condenado a una vida como la suya.
Movio su cabeza de forma negativa mientras que la brisa que nacia con el crepusculo, le traia el aroma de las rosas.
No seria una vida como la suya no lo permitiria, le cuidaria y estaria a su lado en cada paso de su transformacion, se lo habia prometido a parte el no estaria solo , ella siempre estaria a su lado a hora eran familia eran una manada.
Se dejo caer al cesped con este ultimo pensamiento, otra ves tenia a alguien a quien cuidar otra vez hablaba o pensaba en una familia, Cerro sus ojos mientras seguia disfrutando del aroma que le proporcionaba el jardin.